El domingo los ositanos nos trasladamos a Valdeltormo con todo nuestro campamento.
Durante toda la tarde vecinos del pueblo y visitantes pudieron hacer sus propias vasijas de barro, tejieron pulseras y diademas con los telares de rejilla, escribieron su nombre con caracteres íberos y molieron el grano para hacer el pan.
Mientras nuestro carpintero y nuestro herrero iban fabricando algunas piezas.
Y para finalizar la jornada, repartimos entre los asistentes vino templado con miel y hierbas aromáticas que calentaron un poco los cuerpos que empezaban a sufrir los rigores del viento que bajó la temperatura en pocos minutos.
lunes, 7 de octubre de 2013
domingo, 6 de octubre de 2013
Jornada íberas del Matarraña, Cretas.
Ayer por la tarde, el campamento ositano se instaló en Cretas donde mostramos a los visitantes cómo era la vida cotidiana en el mundo ibérico.
Fueron muchos los que se acercaban a preguntar y saciar su curiosidad.
Además realizamos los talleres de escritura, donde los más pequeños escribían su nombre con caracteres íberos y luego se hacían una pulsera con él; de la molienda y cocido del pan en horno de vasija cerámica y entrenamiento con los guerreros.
Los más pequeños iban pasando de un taller a otro para no perderse nada.
También se acercaron al torno de cerámica, donde nuestra alfarera les dejó hacer pequeñas vasijas y otras piezas.
Al final de la tarde, dentro de las jornadas estaba prevista una actividad gastronómica. Los Ositanos nos encargamos de hacer una introducción sobre la gastronomía y la alimentación en el mundo ibérico y luego obsequiamos a los visitantes con un vasito de vino con miel y hierbas arómaticas y un postre de pastelillos de higo seco con almendra. Tanto el vino como los pastelillos fueron un éxito total.
Hoy domingo a partir de las a 17.30 nos instalaremos en Valdeltormo y desarrollaremos los talleres de tejido, cerámica y entrenamiento de guerreros.
Acércate a disfrutar con nosotros.
Fueron muchos los que se acercaban a preguntar y saciar su curiosidad.
Además realizamos los talleres de escritura, donde los más pequeños escribían su nombre con caracteres íberos y luego se hacían una pulsera con él; de la molienda y cocido del pan en horno de vasija cerámica y entrenamiento con los guerreros.
Los más pequeños iban pasando de un taller a otro para no perderse nada.
También se acercaron al torno de cerámica, donde nuestra alfarera les dejó hacer pequeñas vasijas y otras piezas.
Al final de la tarde, dentro de las jornadas estaba prevista una actividad gastronómica. Los Ositanos nos encargamos de hacer una introducción sobre la gastronomía y la alimentación en el mundo ibérico y luego obsequiamos a los visitantes con un vasito de vino con miel y hierbas arómaticas y un postre de pastelillos de higo seco con almendra. Tanto el vino como los pastelillos fueron un éxito total.
Hoy domingo a partir de las a 17.30 nos instalaremos en Valdeltormo y desarrollaremos los talleres de tejido, cerámica y entrenamiento de guerreros.
Acércate a disfrutar con nosotros.
Los Ositanos reciben a cientos de visitantes en el Cabezo de Alcalá
El día 21 de septiembre, se celebró en Azaila, la jornada íbera de Sedeisken y allí estuvimos los Ositanos, que montamos nuestro campamento en diferentes estancias del yacimiento del Cabezo de Alcalá.
A lo largo del día, cientos de visitantes se acercaron para realizar la visita guiada y para ver las actividades de la vida cotidiana que los Ositanos realizábamos.
El horno de pan no dejó de funcionar y fueron muchos los que pidieron probar lo que de él iba saliendo.
El telar, el torno alfarero y el comerciante desarrollaron su trabajo durante toda la jornada y los guerreros fueron los encargados de recibir a los visitantes a su llegada al yacimiento.
Disfrutamos de un día perfecto en el que nos transportamos a los tiempos de la cultura ibérica en el mismo escenario donde lo hicieron los antiguos pobladores.
A lo largo del día, cientos de visitantes se acercaron para realizar la visita guiada y para ver las actividades de la vida cotidiana que los Ositanos realizábamos.
El horno de pan no dejó de funcionar y fueron muchos los que pidieron probar lo que de él iba saliendo.
El telar, el torno alfarero y el comerciante desarrollaron su trabajo durante toda la jornada y los guerreros fueron los encargados de recibir a los visitantes a su llegada al yacimiento.
Disfrutamos de un día perfecto en el que nos transportamos a los tiempos de la cultura ibérica en el mismo escenario donde lo hicieron los antiguos pobladores.
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